20140325

La dignidad

Viendo el debate de La Sexta Noche el día de las Marchas de la dignidad




se ve lo que realmente falla en esta democracia. El pueblo no es consciente de la gravedad de lo que ha ocurrido, por lo tanto, una vez más, se puede afirmar que tenemos lo que nos merecemos.
En las últimas elecciones generales el PP salió elegido en base a unas promesas electorales que no sólo no ha cumplido, si no que las ha ejecutado en sentido inverso. 
En nuestro actual sistema, el pueblo establece una especie de contrato con el partido político que él elige. Contrato por el cual, el partido político elegido ejecuta lo recogido en el programa electoral propuesto. Sin embargo, no hay nada estipulado sobre el incumplimiento de dicho contrato. Cuando el partido político no cumple el contrato debe hacerse responsable e indemnizar al pueblo.
Por lo tanto, el argumento de que el gobierno no debe obedecer a las manifestaciones porque tiene el poder que le ha otorgado todo el pueblo en democracia, es cierto, sí, y sólo sí, el gobierno cumple las obligaciones recogidas en su programa electoral presentado en las elecciones, en base al cual, le ha sido otorgado el gobierno de la nación. En el momento en que el partido político no cumple esas obligaciones recogidas en su programa electoral, queda fulminante y categóricamente deslegitimado en todas y cada una de sus acciones, y en consecuencia, las manifestaciones del pueblo se convierten, lamentablemente, en la primera fuente de decisión democrática como si de una comunidad tribal de la edad media se tratara.
Pero no se vayan, aún hay más. Esta crisis de valores, que indirectamente repercute en la economía, viene de bastante atrás. Finales de los '80 aproximadamente, con la corrupción total de los sociolistOs y su PSOEz. Pero como hay mucha gente que le puede producir un derrame cerebral recordar lo que pasó hace unos 30 años, recordaré lo que pasó hace tan sólo 10 años.
Hace unos 10 años, Jose María Aznar, líder del PP, mintió al pueblo español y afirmó que Irak tenía armas de destrucción masiva. Mentira que le sirvió de argumento para apoyar la invasión de ese país provocando su destrucción político-social, y causar miles de muertes de inocentes. Sin contar además con el apoyo legal internacional, lo que le convirtió, a él y a Mariano Rajoy, su vicepresidente en aquellos momentos, en los mayores criminales de guerra de la historia reciente española. Más tarde, Aznar puso como líder del PP a su vicepresidente, y delfín, Mariano Rajoy. Sin embargo al pueblo español no le pareció importante que los líderes del PP fuesen los mayores criminales de guerra de la historia reciente de España, y les otorgó el poder de gobernar España.
En resumen, tenemos lo que nos merecemos. Ni más, ni menos. Pura democracia. Lo del 22-M fue una marcha del pueblo contra sí mismo. Democracia en estado puro. Exactamente, democracia en estado puro, dentro de un manicomio.

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